miércoles, 14 de septiembre de 2011

Mensajes Virgen Maria agosto


PRIMER VIERNES: 05-AGOSTO -2011

Duodécima estación, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, hijos muy amados, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo
Hijitos míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todos los habitantes del planeta tierra. En este día mis ojos están llenos de lágrimas, mi corazón sangra, mi corazón tiene heridas muy profundas causadas por la humanidad, como ya os vengo predicho tantas veces, me manifiesto aquí en esta montaña santa y en otros muchos lugares más del mundo, se ríen de mis mensajes, no creen en mis avisos, se mofan de ellos, hay hijitos míos, si pudierais ver lo que mis ojos ven, cuánto dolor, cuanto llanto, cuantas calamidades, pasareis todos por ellas si realmente no me escucháis.

Luz Epifanía:
Señor, mi Señor, he aquí tu pequeña esclava, Señor, estas sangrando tu también, Señor, veo descenderse de ti copiosas gotas de sangre, Señor, tu túnica también está ensangrentada, ¿Quién te hace tanto daño?, dímelo Señor no tengas reparo alguno, esta humanidad que la ves perdida, Tú Señor ayúdala, hazle comprender, entender Señor, hazles creer en Ti, tu sabes como hacerlo, perdónalos, los que han enloquecido  no saben lo que hacen. Señor… Bendíceme.

La Stma Virgen:
Hijos míos, entendéis estas palabras que salen del corazón de mi vidente. Doy paso a mi amado Hijo Jesús, escuchadle, obedecedle.
Jesús:
Hermanos, soy Jesús, Jesús de Nazaret, el Llagado, el Crucificado, el Hijo del Padre. Un día más desciendo del cielo al lado de mi Santa Madre para derramar sobre vosotros Gracias Especiales, para que podáis soportar tantas y tantas calamidades, ahora hermanos bendigo vuestros cirios. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo.  Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo.
Sobre vuestros cirios, en este día hermanos, he derramado una gracia especial,  ahora doy paso a mi Madre Santa.

La Stma Virgen:
Hijitos míos, sin más por hoy, os tengo que preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al obispo de Roma, vuestro Papa?  Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos? Veo tanta pobreza en ese amor, hijitos míos, esforzaos y avanzaréis.
          Y sin más Yo os bendigo, en este día, en presencia de mi Amado Hijo, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós hijitos míos

PRIMER SÁBADO: 06-AGOSTO – 2011


Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis a la Stma Virgen dice:
Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, hijos muy amados, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo
Hijitos míos, el mensaje de hoy va dirigido a todo mi Ejército Blanco, En este día os digo hijitos, lo que mis ojos ven, ven… (con profundo dolor) a decenas de millares de hijos míos y hermanos vuestros que han dado la espalda a Cristo y caminan hijitos míos, de mano de mi adversario hacia el abismo más profundo de todos los abismos, por eso os pido a todos vosotros, toméis de la mano aquellas almas que veáis perdidas las llevéis a Cristo, con la fe de Cristo.  


Luz Epifanía:
Señor, mi Señor, me asfixia, me asfixia tu dolor Señor, con lo que yo te amo, a veces te pregunto ¿porqué estas en este estado? Dime ¿por qué? ¡Porqué las almas se alejan de ti!, llámalas Señor, tú tienes poder para ello, llámalas y ellos retrocedan a ti. Haz lo que te pido ¿Qué…? ¿Qué la mayoría de ellos son niños?, pues Señor, con más motivo, ¡ayúdalos! Ayuda a todos aquellos que veas perdidos, ¡ayúdalos! Concédeme esa gracia Señor, pobrecillos me ahoga tu dolor… (tose y se ahoga) que profundo es. ¡He aquí tu esclava! Bendíceme, protégeme y dime cada día lo que debo hacer para ayudarte a Ti y a nuestra Santa Madre.


La Stma Virgen:
Hijos míos, el dolor de mi vidente es tan profundo, ¡hay hijitos míos! Si pudierais entender, haced lo que os pido, encaminad a todos, haced caso a Cristo y a su Iglesia, siempre con la fe de Pedro, si hijos míos.
Hijos míos, sin más por hoy, os tengo que preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al obispo de Roma vuestro Papa?  ¿Y vosotros, os amáis hijitos míos?, veo tanta pobreza, que me causa tanto dolor.
 Sin más Yo os bendigo, en presencia de mi amado hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós hijitos míos.






13 – AGOSTO – 2011


Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:

Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo

Hijitos míos, hijos muy amados, el mensaje de hoy va dirigido a los habitantes de esta nación. A todos los cristianos, mis ojos lloran, mis ojos lloran por lo que ven, veo una nación divida, una nación desprotegida, por un lado veo hijitos míos, a los cristianos, por otro El Dragón Rojo, por otro lado el ateísmo por otro lado el marxismo, hay hijitos míos, persiguiéndoos a todos los cristianos de mano de mi adversario, persiguen a todos los seguidores de Cristo, por eso os pido hijitos míos, es mi deseo, os pido en este día, levantéis todos  los seguidores de Cristo, una fuerte barrera de oración en torno al obispo de Roma, vuestro Papa y todos sus seguidores, haced lo que os pido hijitos míos.

Hijitos míos, orad, levantad esa fuerte barrera como os tengo mandado, orad con la palabra, orad con la mente, orad con el corazón.

Y sin más yo os bendigo hijitos míos, bajo esta intención, a todos os pregunto: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al Obispo de Roma vuestro Papa?  ¿Y vosotros os amáis hijitos míos?
Y sin más yo os bendigo en este día, en presencia de mi amado hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.

Adiós hijitos míos, sed fuertes y haced lo que os pido.