domingo, 3 de junio de 2012

Mensajes Virgen Maria Mayo 2012



PRIMER VIERNES: 04 – MAYO – 2012


Duodécima estación, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:

Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.

Hijitos míos, hijos muy amados, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido con fe a esta montaña santa, habéis subido con oración en vuestro corazón y el dolor en vuestras almas.

Hijitos míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido todo mi Ejército Blanco también a su pastor. Con profundo dolor os digo en este día lo que mis ojos ven: Veo a las fuerzas masónicas que han entrado en las profundidades de la santa iglesia de Cristo y de modo solapado, con gran sigilo, están construyendo su cuartel. ¡Ay hijitos míos cuanto dolor! Por eso os pido una vez más: Orad por mis monjas, orad por mis curas, orad por mis obispos, orad por mis cardenales, orad por el obispo de Roma, vuestro Papa. Todos corren hijitos míos, un gran peligro.

Hijitos míos, sin más por hoy, os pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis vuestro vicario el Santo Padre? Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Esforzaos, amaos, y ayudaos mutuamente, y no tengáis miedo, los corazones de Jesús y de María os guían y protegen.

Y sin más Yo os bendigo en este día, en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.

Adiós hijitos míos.











PRIMER SABADO: 05 - MAYO – 2012

Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:

Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.

Hijitos míos, hijos muy amados, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo.

 Hijitos míos, el mensaje de hoy  es de dolor y va dirigido a todos los bautizados del planeta tierra. Hijitos míos, en este día os pido, abridme la puerta de vuestro corazón, ha llegado en tiempo en que todos, hijos míos, retornéis a vuestro Dios. Los tiempos son malos, muy malos, y en este día os digo lo que mis ojos ven: Veo la copa de la Divina Misericordia muy colmada. ¡Ay hijitos míos! Haced lo que os pido, Yo, vuestra Madre celestial, de mano de mi Hijo Jesús, mi amado Hijo Jesús, desciendo del cielo, vengo a salvaros, hijitos míos, por eso es que os pido sepáis entender todos y cada uno de mis mensajes. Son los avisos que yo os vengo a dar. Orad hijitos míos como os tengo mandado. Orad con la palabra, orad con la mente, orad con el corazón, no os soltéis de mi mano, caminad conmigo y seréis salvados

Hijitos míos esperando y deseando entendáis y creáis todos mis avisos os tengo que preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al obispo de Roma, vuestro Papa? Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos? Respondedme con el corazón.

Y sin más Yo os bendigo, en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.

Adiós hijitos míos.







13 – MAYO – 2012

Cuarto misterio de gloria, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo.
 Hijitos míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido todos los bautizados del planeta tierra y a todos los cristianos seguidores de Cristo. En este día hijitos míos, os digo con profundo dolor lo que mis ojos ven: Veo a los cristianos perseguidos, veo una gran persecución llena de violencia sangrienta. ¡Ay hijitos míos cuanto dolor! Pero no tengáis miedo, sed valientes, sed fieles seguidores de Cristo y de su Santa Iglesia. Yo, vuestra Madre celestial, ahora más que nunca, estaré con vosotros. Necesitáis de mí, hijitos míos. Yo os prometo en estos tiempos, estar a vuestro lado, abriros con frecuencia el refugio de mi Corazón Inmaculado… sí hijitos míos, un día más mi amado Hijo Jesús está a mi lado, desciende del cielo con vuestra Madre Celestial, a esta montaña Santa, escuchadle, haced lo que os pide.

Jesús:
Hermanos, Yo soy Jesús, Jesús de Nazaret, el Llagado, el crucificado, el Hijo del Padre. Como veis hermanos desciendo del cielo con mi Madre Santa, no falto a nuestras citas, desciendo del cielo de mano de mi Madre Santa a traeros la salvación. Ahora hermanos, un día más voy a bendecir con una luz especial. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo.
Vuestros cirios hermanos, han sido bendecidos, ponedlos con fe y amor en el centro de vuestros hogares. Y hoy os digo: Yo soy la Luz, la Luz y la Vida. Ahora doy paso a mi Madre Santa.

La Stma Virgen:
Hijitos míos, sin más por hoy, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os tengo que preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo, Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al Obispo de Roma, vuestro Papa? Orad por él.  Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Un día más os digo: Haced crecer el amor en vuestros corazones.
Y sin más Yo os bendigo, hijitos míos, en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.
  Adiós hijitos míos.