PRIMER SABADO: 01 – ABRIL
– 2023
Cuarto
misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis y dice a la Stma Virgen:
Hijos
míos no temáis, soy vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios
reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de oración
habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina
presencia os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a
la Stma y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los
pecadores del mundo.
Hijitos
míos el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todos los fieles seguidores
y servidores de Cristo. Sí, hijitos míos escuchad y entended lo que en este día
os vengo a pedir. Este es el tiempo de mi gran dolor. Ver hijitos míos, lo que
estoy viendo. Veo hijitos míos, veo multiplicarse los ángeles del mal, se
multiplican y crecen y crecen sin parar. Estos ángeles del mal cogen a las
almas, las seducen y las llevan a la perdición. Sí, hijitos míos, son tantas y
tantas, es tan grande mi dolor que jamás podréis imaginar.
Hace
un tiempo os predije: El manantial de mis ojos, el manantial de mis lágrimas se
está acabando. Sí, hijitos míos, y ahora os hago saber: Mis venas se rompen y
derraman sangre por mis lágrimas. Sí hijitos míos, día a día crece y crece sin
parar.
Un
día más os hago saber: Desciendo del cielo de mano de mi Amado Hijo, Jesús, a
esta montaña Santa a salvaros. Por eso hijitos míos, tened cuidado, los ángeles
del mal son tan perversos que jamás podréis imaginar. ¿Me habéis entendido
hijitos míos? Tened cuidado hijitos míos. Una vez más os pido: Sed mansos como palomas,
pero astutos como serpientes porque no podéis imaginar hasta donde llegan estos
ángeles del mal, hasta donde llega su seducción y maldad
Ahora
hijitos míos, mi Amado Jesús está a mi lado. Amadle, Amadle, seguidle,
adoradle, escuchadle y haced lo que os pide.
Jesús:
Hermanos no temáis soy Jesús, vuestro Jesús,
el Hijo del Padre, el Llagado, el Crucificado. Como veis hermanos no falto a
nuestras citas. Un día más desciendo del cielo de mano de mi madre santa,
vuestra Madre, María Inmaculada a traeros la salvación. Ahora hermanos bendigo
vuestros cirios. Gloria Patri, et Filio,
et Spiritui Sancto. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Gloria Patri,
et Filio, et Spiritui Sancto”.
Hermanos, vuestros cirios un día más están
bendecidos con una gracia y luz especial y os pido los cirios que ahora
bendigo, sean encendidos en vuestros hogares y a través de estos cirios, como
ya os tengo predicho, mi luz y mi imagen las 24 horas del día lucirán en
vuestros hogares. ¿Lo habéis entendido? Mi luz y mi imagen
Ahora
hermanos, doy paso a mi Madre Santa, vuestra madre, María Inmaculada. Amadla,
seguidla, y haced cuanto os pide.
Hijitos
míos, y sin más por hoy, en presencia de mi Amado Hijo, Jesús y en la cima de
esta montaña santa os pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis
a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios
Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? La Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi
Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la Iglesia Santa de Cristo? Ayudadla, amadla,
orad por ella ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿os amáis
hijitos míos?
Ésta
es vuestra fe, ésta es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Ahora,
uníos todos, hijitos míos y entrad bajo mi manto santo. Venid, hijitos míos,
acercaos todos al refugio de mi Corazón Inmaculado. Sí, hijitos míos, mi manto
es grande y os acoge a todos lo que en este día habéis subido a esta montaña
santa. Como ya os tengo predicho, bajo mi manto santo día a día seréis
bendecidos y protegidos.
Y
ahora, en este estado de gracia, hijitos míos, bajo mi manto santo, en la cima
de esta montaña santa y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, os bendigo en
este día hijitos míos, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su
Espíritu.
Adiós
hijitos míos. Caminad conmigo, no faltéis a nuestras citas.
PRIMER
VIERNES: 07 - ABRIL – 2023
Novena estación, Luz
Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos míos no temáis, soy vuestra
Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos
vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las
gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta
montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os
inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y
Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores
del mundo.
Hijitos míos el mensaje de hoy es de
dolor y va dirigido a toda
la humanidad. Hijitos míos, en este día os hago saber, es el día de mi profundo
dolor. Mi Corazón, hijitos míos, está lleno de dolor, traspasado por una espada
de dolor, al ver a mi Hijo, a mi Amado Hijo, Jesús, llagado y crucificado. Sí
hijitos míos, se entregó por amor, por amor a la humanidad. Mi Adversario,
Satanás quiso acabar con Él, como en este tiempo hijitos míos, quiere y prepara
acabar con mi Santa Iglesia, Vuestra Santa Iglesia, la Santa Iglesia de Cristo.
Qué gran dolor, hijitos míos, en este día hay en mi Corazón. Por eso os pido a
todos hijitos míos, subáis al Calvario ofreciendo este Santo Viacrucis por la
paz del mundo, por esas naciones que en guerra están, acabe el tormento y reine
la paz, el amor y la conversión de toda la humanidad. Como ya os tengo
predicho, hijitos míos, en esta subida al Calvario no estáis solos, mi Amado
Hijo Jesús, Yo, vuestra Madre Celestial, oramos con vosotros y por vosotros.
Así pues, hijitos míos pedid todos, por la conversión de la humanidad.
Haced lo que os pido.
Subid al Calvario orando en cada una de sus estaciones por la paz de esas
naciones en guerra y la conversión de toda la humanidad
Y sin más por hoy hijitos
míos y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, os pregunto una vez más:
¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras?
¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? La
Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la
Iglesia Santa de Cristo? Orad por ella. Amadla, ayudadla. ¿Amáis a vuestro
Pastor? Orad por él. Y vosotros, ¿os amáis, hijitos míos?
Esta es vuestra fe, esta
es la Verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Y ahora uníos todos
hijitos míos, venid a mi y entrar bajo mi manto santo. Sí, hijitos míos, bajo
mi manto santo día a día seréis bendecidos y protegidos. Sí hijitos míos, como
ya os tengo predicho, bajo mi manto santo camino con todos vosotros hacia la
morada santa. Sí, hijitos míos entrad todos.
Y en este estado de
Gracia, bajo mi manto santo y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, Yo os
bendigo en este día, hijitos míos, como el Padre os bendice, por medio del Hijo
y con su Espíritu.
Adiós hijitos míos. Caminad
conmigo y haced todos los días lo que os pido. Adiós hijitos míos. Hasta
pronto.
13 – ABRIL – 2023
Cuarto misterio de dolor, Luz Epifanía entra en éxtasis y dice a la Stma Virgen:
Hijos míos no temáis, soy vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos míos el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a toda la humanidad. Con profundo dolor os digo en este día, hijitos míos, lo que mis ojos ven: Veo un mundo oscurecido, muy oscurecido, lleno de pecado, de pecado y dolor. Deteneos hijitos míos, deteneos y no pequéis más. No atentéis contra la vida, no atentéis contra mi santa iglesia, vuestra santa iglesia, la Iglesia Santa de Dios. Y en este día os digo a todos: Abrid los ojos del alma, mirad el cielo, mirad la tierra, mirad hijos míos, mirad y entended hijitos míos y dejad de pecar, dejad de pecar. Orad hijitos míos todos, orad todos día a día.
Y en este día os hago saber a todos:
Papás, mamás, traed a vuestros hijos a esta montaña santa, no vengáis solos.
Entrad bajo mi manto santo todos. ¿lo habéis entendido?
Y sin más por hoy hijitos míos en la cima
de esta montaña santa y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, os pregunto una
vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus
obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo?
La Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia,
la Iglesia Santa de Cristo? Amadla, ayudadla, orad por ella. ¿Amáis a vuestro
Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Ahora uníos todos, hijitos míos y entrad bajo mi manto santo. Acercaos todos los que habéis subido en este día citado a esta montaña santa. Entrad todos hijitos míos, acercaos al refugio de mi Corazón Inmaculado. Sí, hijitos míos, todos. Como ya os tengo predicho bajo mi manto santo día a día seréis bendecidos y protegidos. Un día más os hago saber: Bajo mi manto santo vamos día a día hacia la morada santa. Sí, hijitos míos, a todos os acojo bajo mi manto santo.
Ahora bajo mi manto santo, hijitos míos, en la cima de esta montaña y en presencia de mi Amado Hijo Jesús, Yo os bendigo en este día como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós hijitos míos.