PRIMER
VIERNES: 01– ABRIL – 2022
Novena estación, Luz
Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos míos no temáis, soy vuestra
Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos
vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy
las gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta
montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os
inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y
Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores
del mundo.
Hijitos míos el mensaje de hoy es
de dolor y va dirigido atoda la
humanidad. Sí, hijitos míos, en este día mi corazón sangra por lo que mis ojos
ven. En este día os hago saber a todos: El Vaticano hijitos míos, en peligro
está, mi Adversario, Satanás, tiene enfocado hacia él un arma mortal. Así pues,
hijitos míos, en este día os pido: Orad por el Vaticano, orad por el Vaticano,
sacerdotes de mi Amado Hijo Jesús, orad y orad
Y a vosotros hijitos
míos os pido en este día, a todos los que habéis subido a esta montaña santa,
subáis al Calvario orando en cada una de sus estaciones por el Vaticano. Orad
por el Vaticano, orad por el Vaticano. Como ya os tengo predicho hijitos míos,
en esta subida al Calvario no estáis solos, mi amado Hijo, Jesús y Yo Vuestra
Madre Celestial, oramos con vosotros y por vosotros. Sí hijitos míos. Y ahora
hijitos míos, en este estado de dolor, en el que mi corazón está os pregunto a
todos: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus
obras?¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo?
¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la Iglesia Santa de Cristo?
Orad por ella. ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros, ¿os amáis,
hijitos míos?
Ésta es vuestra fe,
ésta es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar
Ahora hijitos míos
uníos todos y entrad bajo mi manto santo. Sí hijitos míos, bajo mi manto santo,
día a día seréis bendecidos y protegidos. Recordad todos, bajo mi manto santo,
día a día, camino con vosotros, bajo mi bendición divina a la morada santa. Sí
hijitos míos.
En este estado de gracia, bajo mi manto santo, en presencia de mi Amado Hijo Jesús. Escuchadle, escuchadle, haced lo que os pide. Sí hijitos míos, bajo mi manto santo.
Jesús:
Hermanos, no temáis,
soy Jesús, vuestro Jesús, Jesús de Nazaret, el Llagado, el Crucificado. Como
veis hermanos soy fiel a nuestras citas, aquí en esta montaña santa. Y en este
día, hijitos míos, bendigo vuestros cirios: “Gloria Patri, et Filio et Spiritui
Sancto. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Gloria Patri, et Filio, et
Spiritui Sancto”.
Vuestros cirios,
hermanos, un día más están bendecidos con una gracia especial para alumbrar
vuestros hogares y protegerlos de todo mal.
Ahora hermanos, doy paso a mi Madre Santa. Escuchadla, seguid bajo su manto santo.
La Stma Virgen:
Hijitos míos, venid
todos a mí y en este estado de gracia, bajo mi manto santo, en presencia de mi
Amado Hijo Jesús, Yo os bendigo en este día, hijitos míos, como el Padre os
bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.Adiós hijitos míos.
PRIMER SABADO: 02 – ABRIL – 2022
Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis y dice a la Stma Virgen:
Hijos míos no temáis, soy vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos míos el mensaje de hoy es de
dolor y va dirigido a toda la humanidad. Hijitos míos, en este día mis ojos
lloran, mi corazón sangra por lo que mis ojos ven. Veo un manto negro de dolor
extenderse porco a poco por todo el planeta hijos míos. Este manto negro
oscurecerá la tierra, provocará tanto dolor que jamás podréis imaginar.
Hace un tiempo lo predije, pero ahora
hijitos míos, ha comenzado a moverse y día a día a caminar. Os pido a todos: Tened
el cirio encendido. Sí, hijitos míos, si no tenéis el cirio encendido, la gran
oscuridad invadirá vuestros hogares y los llenará de dolor. Así pues, hijitos
míos, en este día os pido: Orad día a día el Santo Rosario, el Santo Rosario
rezadlo en familia, con el cirio encendido y no entrará en vuestro hogar.
Y escuchad hijitos míos, cuando veáis la oscuridad, cerrad puertas y ventanas y el cirio, hijitos míos las veinticuatro horas del día tenedlo encendido. Sí, hijitos míos.
Y sin más por hoy, hijitos míos, en
presencia de mi Amado Hijo y en la cima de esta montaña santa, os pregunto una
vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus
obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo?
La Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia,
la Iglesia Santa de Cristo? Orad por ella. ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por
él. Y vosotros, ¿os amáis, hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Ahorahijitos míos, uníos todos, y entrad bajo mi manto santo. Venid a mí hijitos míos. Sí hijitos míos, todos los que en este día habéis subido a esta montaña santa, os acojo bajo mi manto santo. Y como ya os tengo predicho, bajo mi manto santo día a día, seréis bendecidos y protegidos. Sí, hijitos míos, día a día camino con vosotros hacia la morada santa.
En este estado de gracia, en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, en la cima de esta montaña santa, Yo os bendigo hijitos míos, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós hijitos míos. No
salgáis de mi manto santo.
13
– ABRIL – 2022
Cuarto misterio de gloria, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma. Virgen dice:
Hijos míos no temáis, soy vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos míos el mensaje de hoy es de dolor
y va dirigido a toda la humanidad. Sí, hijitos míos, hace un largo, largo
tiempo, Yo, Vuestra Madre Celestial, aquí en la cima de esta montaña santa, os
predije con dolor: Raras enfermedades, raras y dolorosas, vendrán a la
humanidad. Y hoy os hago saber a todos, hijitos míos, aún, la primera no ha
acabado, pero detrás viene otra y otra y otra más. Por eso os digo en este día
y a todos os hago saber: Estad unidos, orad unidos, buscad el cirio encendido,
rezad día a día el santo rosario, mi santo rosario con fe y con amor, con
humildad y santidad. Haced lo que os pido hijitos míos.También os hago saber,
una vez más, paséis con frecuencia por el sacramento de la confesión. Vivid con
fe y con amor la Santa Eucaristía, haced lo que os pido.
Ahora hijitos míos, a vosotros me dirijo, sacerdotes de mi Amado Hijo Jesús: Dejadlo todo, subid a esta montaña santa todos los días citados y entrad bajo mi manto santo. Haced lo que os pido, haced lo que os pido
Y sin más por hoy, hijitos míos, en la
cima de esta montaña santa y en presencia de mi Amado Hijo Jesús os pregunto
una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a
sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu
Santo? La Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia? Orad por ella
¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros, ¿os amáis, hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta es la verdad.
Ahora hijitos míos, en este estado de gracia y en la cima de esta montaña santa, venid a mí, hijos míos, todos los que habéis subido este día a esta montaña santa y entrad bajo mi manto santo. Bajo mi manto santo, día a día seréis bendecidos y protegidos. Venid a Mí, hijitos míos, como ya os tengo predicho, bajo mi manto santo día a día seréis bendecidos, protegidos y camino con vosotros hacia la morada santa. Sí hijitos míos
Ahora, en este estado de gracia, bajo mi manto santo y en presencia de mi Amado Hijo Jesús, os bendigo en este día hijitos míos como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.
Haced lo que os pido,
hijitos míos. Haced lo que os pido.