PRIMER
SÁBADO: 01 – MARZO – 2014
Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis
y la Stma Virgen dice:
Hijos míos
no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine
siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad
saludando a la Santísima y Divina Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados
y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todos los habitantes de
este planeta, cristianos y ateos. Hijitos míos, en este día os pido a todos,
quiero ser entendida y obedecida. Os pido cenáculos familiares, sí hijitos
míos, cenáculos de oración con Dios y conmigo. Como ya os vengo anunciando, el
tiempo más doloroso de todos los tiempos está llegando. Quiero haceros entender
en este día, Yo, Vuestra Madre Celestial, al abrirme las puertas de
vuestros hogares, yo entro en la familia
y protejo a niños, jóvenes y mayores… sí, hijitos míos, protejo a toda la
familia.
Hijitos
míos, mis mensajes serán breves pero fáciles de entender. Mis ojos lloran, mi
corazón sangra por lo que mis ojos ven. Os amo, desciendo del cielo a esta
montaña santa, en este día de cita, a llenaros de gracia, a prepararos hijitos
míos para los tiempos que están llegando.
Ahora
hijitos míos, sin más por hoy, en presencia de mi Amado Hijo Jesús os tengo que
preguntar: ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios
Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa
Iglesia? ¿Amáis a vuestro pastor? Orad
por él. Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Amaos todos,
os quiero ver a todos unidos como una piña santa. Respondedme: ¿os amáis unos a
otros?
Ésta es
vuestra fe, ésta es la verdad.
Y sin más yo
os bendigo en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por
medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós
hijitos míos
PRIMER
VIERNES: 07 – MARZO – 2013
Décima estación, Luz Epifanía entra en éxtasis y la
Stma Virgen dice:
Hijos míos
no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine
siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad
saludando a la Santísima y Divina Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados
y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy va dirigido a todos los que en este día habéis subido a
esta montaña santa. Quiero hijitos míos que subáis todos conmigo al Calvario,
ofreciendo este santo viacrucis por mis
curas, sí hijitos míos, mis monjas, mis obispos, por mis cardenales. Yo,
vuestra Madre celestial y mi amado Hijo, Jesús, oraremos von vosotros y por
vosotros. Sí hijitos míos, en cada una de las estaciones de este santo
viacrucis, viacrucis de esta montaña Santa, orad con fe, pidiendo a vuestro
Padre celestial, por toda mi Santa Iglesia.
Hijitos
míos, sacerdotes de mi amado Hijo Jesús, abridme los oídos del alma y haced lo
que os pido: Bendecid a estos pequeños, ayudad a estos pequeños, amad a estos
pequeños. Ésta, hijitos míos, es mi obra.
Luz Epifanía:
Señor, mi Señor, como te encuentro en este día. Señor,
ayúdame, ayúdame a superar este dolor. Señor te veo con la cruz a cuestas.
Señor, déjame que te ayude, déjame que me acerque a ti… Señor, no me detengas…
no, no, no, déjame que te ayude… me ahogo, me ahoga tu dolor Señor… ¿quién son
los que te acompañan?... ¿Quién te hace esto Señor? ¿Quién te carga la cruz al
hombro, Señor?... perdónalos Señor, perdona a tu pueblo porque no saben lo que
hacen
Mírame de frente Señor… ¡cuánto dolor hay en tu
rostro! He aquí tu pequeña esclava, Señor… Yo te quiero Señor, hay tantas cosas
que no entiendo y es porque soy tan pobre. Señor… sí, que Tú me las revelarás
en su momento… gracias Señor. Sabes que yo te pido cada día que se cumpla en
mí, tu voluntad, no me importa dar la vida por ti, Señor, porque mi vida eres Tú… Señor me ahogo, tu
dolor entra en mi garganta
La Stma Virgen:
Hijitos míos
si pudierais entender el amor y el dolor de este pobre alma. Sí hijitos míos,
ora con vosotros y por vosotros ofreciéndose cada día, ofreciendo su vida por
mi santa iglesia… sí, y por todos vosotros.
Y sin más
por hoy, hijitos míos, en presencia de mi Amado Hijo Jesús os tengo que
preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus
obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo?
¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis a vuestro pastor? Orad por él. Y vosotros ¿os amáis hijitos
míos?
Una vez más
os pido, hacer crecer el amor en vuestros corazones.
Y sin más yo
os bendigo en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por
medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós
hijitos míos
13 – MARZO –
2014
Cuarto misterio de luz, Luz Epifanía entra en éxtasis
y la Stma Virgen dice:
Hijos míos
no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine
siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias, a todos los que habéis subido en este día
con fe y con amor, a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad
saludando a la Santísima y Divina Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados
y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy es de dolor, y va dirigido a todos los habitantes de
este planeta. Hijitos míos, en este día os llamo a todos vengo a pediros,
forméis una fuerte barrera de oración y protección en torno a mi ¨Santa
Iglesia. Como ya os tengo predicho, mi adversario, Satanás, está llenando la
tierra de una semilla infernal. Con profundo dolor os digo, que esta semilla
maltita está dando fruto abundante. Por eso os digo: Papás, mamás, quiero
hijitos míos que llevéis a vuestros hijos, los llevéis a la oración, a la Santa
Eucaristía. Haced lo que os pido. Quiero ser entendida y obedecida. Sí,
hijitos, vosotros haced lo que os pido, y Yo, Vuestra Madre Celestial, os
protegeré.
Ahora
hijitos míos, mi Amado Hijo Jesús está a mi lado. Escuchadle, amadle, adoradle,
haced lo que os pida.
Jesús:
Hermanos,
soy Jesús, Jesús de Nazaret, el Llagado, el Crucificado, el Hijo del Padre.
Como veis hermanos, no falto a nuestras citas. Desciendo del cielo de mano de
mi Madre Santa, vuestra Madre, María Inmaculada, a traeros la salvación. Con la
gracia de cada día, que derramo sobre vosotros, permanecéis en el camino, en el
camino que conduce al reino de los cielos.
Ahora,
hermanos, voy a bendecir vuestros cirios: Gloria Patri et Filio et Spiritu
Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu
Santo.
Vuestros
cirios hermanos, han sido bendecidos. Una vez más, como ya os tengo predicho, a
través de estos cirios, mi luz y mi imagen estarán presentes día a día en
vuestros hogares, las fuerzas malignas no podrán traspasar los umbrales de
vuestros hogares.
La Stma Virgen:
Hijitos míos
y sin más por hoy, en presencia de mi Amado Hijo Jesús os pregunto una vez más:
¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras?
¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis
mi Santa Iglesia? ¿Amáis a vuestro pastor?
Orad por él.
Os pido a
todos, hijitos míos, cuando subáis a esta montaña santa, subáis con fe, con
espíritu de oración. Haced lo que os pido y Yo os llenaré de gracia.
Y sin más yo
os bendigo, hijitos míos, en presencia
de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su
Espíritu.
Adiós
hijitos míos