PRIMER
VIERNES: 01 – SEPTIEMBRE – 2023
Novena
estación, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma. Virgen dice:
Hijos
míos, no temáis, soy vuestra madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios
reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
divina presencia os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad,
saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros
pecados y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy es de dolor, y va dirigido a decenas y decenas de
millares de mamás que no dejan a sus hijos nacer. En este tiempo de la Gran
Prueba crecen y crecen, crecen y se multiplican. Hijas mías dejad a vuestros
hijos nacer, acariciarlos desde vuestro propio vientre, no les quitéis la vida,
acariciarlos, amarlos… sí, hijitas mías, amad a esos hijitos, a esos angelitos
que Dios os ha dado y están en vuestro vientre. Deteneos, haced lo que os pido,
acariciarlos, amarlos y no tengáis miedo. Acercaos a mí, sí hijitas mías,
acercaos a mí, acercaos a vuestra Madre Inmaculada y Yo os ayudaré. Haced lo
que os pido, haced lo que os pido, amad a vuestros ángeles, amadlos.
Ahora
hijitos míos mi Amado Hijo, Jesús, está a mi lado. Escuchadle, amadle,
adoradle, haced lo que os pide.
Luz
Epifanía:
Señor,
otra vez llagado, Señor no puedo, no puedo más. ¡Ay Madre! ¿Qué tienes en tus
brazos Madre? ¿Qué son esos angelitos? Madre, no te caben en los brazos. ¿Qué
es esto Madre?... Lloran Madre, lloran esos ángeles.
Jesús:
Hermanos
no temáis soy Jesús, vuestro Jesús, Jesús de Nazaret. El Llagado, el
Crucificado, el Hijo del Padre. Como veis hermanos no falto a nuestras citas.
Un día más desciendo del cielo de mano de mi Madre Santa, vuestra Madre, María
Inmaculada. Sí hermanos, aquí, a esta montaña santa a traeros la salvación.
Ahora,
en este día voy a bendecir vuestros cirios. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui
Sancto. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Gloria Patri, et Filio, et
Spiritui Sancto.
Hermanos, vuestros cirios un día más son
bendecidos con una gracia especial. Sí, hermanos, os pido a todos luzcan en
vuestros hogares las veinticuatro horas del día. No se apague nunca la luz que
día a día yo os vengo a traer. Tenedlos día a día que como ya os tengo predicho
a través de estos cirios, mi luz y mi imagen las veinticuatro horas del día
están presentes en vuestros hogares. Haced lo que os pido
La
Stma Virgen:
Hijitos
míos, os pido a todos: Subáis al Calvario ofreciendo este Santo Viacrucis. En
cada una de sus estaciones orad por amor, orad por la vida, orad por la vida,
orad por la vida. Como ya os tengo predicho, hijitos míos, en esta subida al
Calvario no estáis solos. Mi Amado Hijo, Jesús, Yo, Vuestra Madre Celestial
oramos con vosotros y por vosotros.
Ahora
venid todos, hijitos míos, entrad bajo mi manto santo. Sí, todos los que en
este día habéis obedecido y a esta montaña santa y a esta cita habéis subido.
Entrad todos, hijitos míos bajo mi manto santo, os acojo con amor, sentimiento
y dolor. Hijitos míos acercaos todos a la puerta del refugio de mi Corazón
Inmaculado.
Ahora,
en este estado de gracia y en la cima de esta montaña santa, bajo mi manto
santo y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, os pregunto una vez más:
¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras?
¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? La
Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la
Iglesia Santa de Cristo? Orad por ella. ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y
vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Ésta
es vuestra fe, ésta es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Ahora
en este estado de Gracia Divina, bajo mi manto santo y en la cima de esta
montaña santa y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, Yo os bendigo, hijitos
míos en este día, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su
Espíritu.
Ahora
hijitos míos un día más os hago saber que bajo mi manto santo en este día
camino con vosotros a la morada santa, a la morada santa con todos.
Adiós
hijitos míos, Hasta pronto
PRIMER SABADO: 02 – SEPTIEMBRE – 2023
Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía
entra en éxtasis y dice a la Stma Virgen:
Hijos míos no temáis, soy vuestra Madre,
la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las
gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta
montaña santa, en la en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os
inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y
Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores
del mundo.
Hijitos míos el mensaje
de hoy es de dolor y va dirigido a todos los seminarios de todo el planeta
tierra que en peligro están. A vosotros me dirijo, profesores jefes de vuestros
seminarios, os hago saber: Mi Adversario, Satanás ha formado, ha preparado en
este tiempo de la gran prueba, un ejército maldito. Quiere acabar con la Santa
Iglesia, mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la Santa Iglesia de Cristo.
Éstos, hijitos míos, os prevengo una vez más, están bien formados, bien
preparados para entrar en vuestros seminarios y uno a uno acabar. Ya hay muchos
dirigidos por ellos. Tened cuidado, profesores jefes, son tan astutos que jamás
podréis imaginar. Tened cuidado hijos míos, tened cuidado y no los dejéis
entrar. Si supierais hijitos míos, lo preparados que están para cambiar las
leyes, las leyes de la Verdad y construirlas en la maldad. Así pues, hijitos
míos, ya estáis avisados. Abrid los ojos y los oídos del alma y veréis la
verdad.
Hijitos míos y sin más por hoy y en la
cima de esta montaña santa os pido hijitos míos: Venid todos y entrad bajo mi
manto santo. Bajo mi manto santo seréis bendecidos y protegidos. Acercaos todos
a la puerta del refugio de mi Corazón Inmaculado.
Y en este estado de gracia, bajo mi manto
santo y en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, os pregunto una vez más:
¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras?
¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? La
Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la
Iglesia Santa de Cristo? Amadla, ayudadla, defendedla sin miedo y orad por ella
¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta
es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Y ahora hijitos míos, en
este estado de gracia, en la cima de esta montaña santa, bajo mi manto santo y
en presencia de mi Amado Hijo, Jesús, Yo os bendigo en este día, hijitos míos,
como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.
Caminad conmigo un día
más bajo mi manto santo a la morada santa
Adiós hijitos míos.
13 – SEPTIEMBRE – 2023
Cuarto misterio de gloria, Luz Epifanía
entra en éxtasis y dice a la Stma Virgen:
Hijos míos no temáis, soy vuestra Madre,
la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las
gracias a todos los que con fe y espíritu de oración habéis subido a esta
montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os
inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Stma y
Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores
del mundo.
Hijitos míos el mensaje de hoy es de dolor
y va dirigido a todo mi Ejército Blanco y a todo mi Movimiento Sacerdotal
Mariano. Hijitos míos, escuchad y entended lo que en este día os vengo a pedir.
En este día os hago saber a todos: Todo lo predicho por Mí, hasta ahora, paso a
paso, día a día se irá extendiendo por toda la humanidad, lo que estáis viendo
y estáis viviendo, el dolor que parte de la humanidad está viviendo, día a día
en este tiempo de la Gran Prueba, caminará y caminará. Por eso os pido en este
día a todo mi Ejército Blanco y a todo mi Movimiento Sacerdotal Mariano: Estad
unidos, muy unidos y haced lo que os pido. Os pido hijitos míos, todos los días
citados subáis a esta montaña santa y entréis bajo mi manto santo, no dejéis
para luego lo que en este día os pido. Con profundo dolor os hago saber a todo
el que no me sea fiel y haga lo que le pido, se quedará al borde del camino. Haced
lo que os pido, haced lo que os pido, haced lo que os pido.
Sacerdotes de mi Movimiento Sacerdotal
Mariano, no olvidéis lo que os pido, no olvidéis lo que os pido, no hagáis que
mi dolor sea más profundo, al ver a todos aquellos que se quedan al borde del
camino. Haced lo que os pido
Y sin más por hoy, hijitos míos, en
presencia de mi Amado Hijo, Jesús y en la cima de esta montaña santa os
pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces?
¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios
Espíritu Santo? La Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia,
vuestra Santa Iglesia, la Iglesia Santa de Cristo? Amadla, ayudadla, orad por
ella ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta
es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Ahora uníos todos, todos
los que en este día habéis subido a esta montaña santa y entrad bajo mi manto
santo, entrad, hijitos míos, acercaos a la puerta, a la Puerta del Refugio de
mi Corazón Inmaculado, sí hijitos míos, como ya os tengo predicho bajo mi manto
santo, día a día, seréis bendecidos y protegidos. Sí, hijitos míos.
Y ahora en este estado de
gracia, bajo mi manto santo, en presencia de mi Amado Hijo, Jesús y en la cima
de esta montaña santa os bendigo hijitos míos, como el Padre os bendice, por
medio del Hijo y con su Espíritu. Como ya os tengo predicho, día a día bajo mi
manto santo camino con todos hacia la morada santa. Sí hijitos míos.
Adiós hijitos míos.