lunes, 15 de julio de 2013

Mensajes Junio 2013

PRIMER SABADO: 01- JUNIO – 2013

Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis y  la Stma Virgen dice:
Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo.
 Hijitos míos, el mensaje de  hoy es de dolor y va dirigido a mi Santa Iglesia y a todos sus seguidores. Con profundo dolor os digo en este día: Ha llegado el tiempo más doloroso, más sangriento de todos los tiempos. Hijitos míos, por eso os pido una vez más: Orad con la palabra, orad con la mente, orad con el corazón, orad con fe, orad con confianza. Cuando oráis, hijitos míos, mi adversario retrocede… sí hijitos míos, no os dejaré.

Luz Epifanía:
Señor, Señor, estás llagado… Señor me ahogo, tus heridas me asfixian. Señor, yo que te amo tanto no puedo verte así. Señor, si el mundo te viera, si el mundo te viera como te veo yo… sí Señor,  Yo soy tu esclava, todos los días de mi vida estaré a tu servicio hasta que sea llamada por Dios para irme contigo…

La Stma Virgen
Hijitos míos, como todos podéis comprobar, a este pobre alma víctima que fue elegida por Dios Padre ya en el vientre materno, para estar todos los días de su vida al servicio de Dios… sí hijitos míos como ya os tengo predicho, no os dejaré de la mano. A través de este pobre alma víctima todos los días citados me comunicaré con todos vosotros.
Y sin más por hoy, hijitos míos,  esperando y deseando desde lo más profundo de mi corazón inmaculado, hayáis entendido este mensaje, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo la Santísima y Divina Trinidad? ¿Amáis a vuestro pastor? Amad todos los días de vuestra vida, ayudando y respetando mi Santa Iglesia. Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta es la Verdad.
Y sin más Yo os bendigo hijitos míos, en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.
Adiós hijitos míos.



PRIMER VIERNES: 07 – JUNIO -  2013


Novena estación Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:

     Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros

Hijitos míos, hijos muy amados, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo.

 Hijitos míos, el mensaje de hoy es de dolor, y va dirigido a todo mi Ejército blanco, presente y ausente. Hijitos míos, con profundo dolor os digo: Una espada de doble filo traspasa hoy mi corazón, al contemplar, hijitos míos, en este día, lo que mis  ojos ven. Veo a la tierra, a todo el planeta tierra, perder la luz, la luz del sentido, la luz del evangelio, la luz de la Vida. Veo a mi adversario al frente de su ejército, proclamándose rey, seduciendo a las almas con la envidia, el egoísmo, el odio, la droga, la prostitución… sí hijitos míos, con ellas caminan a la perdición

Hijitos míos, tened cuidado, sed astutos, mansos como palomas pero astutos como serpientes, mi adversario Satanás, tiene gran poder para seducir a las almas. Orad como os tengo mandado, orad con la palabra, orad con la mente, orad con el corazón. Como ya os he predicho, cuando oráis hijitos míos, mi adversario retrocede. No os dejéis seducir, no os soltéis de mi mano. Orad todos los días y en especial en este Santo Vía crucis meditando en cada estación, pidiendo con el corazón por mis almas consagradas, por la Santa Iglesia de Cristo, vuestra Santa iglesia.

Y sin más por hoy hijitos míos en presencia de mi Amado Hijo Jesús os tengo que preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis a vuestro pastor? Orad por él. Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Haced crecer el amor en vuestros corazones y se alejará mi adversario.

Y sin más Yo os bendigo,  como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.

Adiós hijitos míos.

13- JUNIO – 2013

Cuarto misterio de Luz, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
     Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros
Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo,  en acto de humildad, saludando a la Santísima y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los pecadores del mundo.
 Hijitos míos, el mensaje de hoy va dirigido a todos los  que en este día habéis subido a esta montaña santa. En este día os pido: En este tiempo, hijitos míos, en que le tierra se oscurece, no tengáis miedo, sed valientes, humildes y sencillos. Yo en este día desciendo del cielo, de mano de mi Amado Hijo, Jesús y os traigo en este día una gracia especial. Sí hijitos míos, en este día y en presencia de mi Amado Hijo Jesús, voy a abrir para todos, la puerta del refugio de mi Corazón Inmaculado, pero antes, hijitos míos os tengo que preguntar: ¿Estáis preparados? ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis a vuestro pastor? Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Antes de abrir la puerta del refugio de mi Corazón Inmaculado, escuchad a Cristo. Sí, hijitos míos, mi amado Hijo, Jesús, está a mi lado.
Jesús:
Hermanos, Yo soy Jesús, Jesús de Nazaret. El llagado, el crucificado, el Hijo del Padre. Como veis hermanos no falto a nuestras citas. ¿Y vosotros? Vengo a derramar sobre esta montaña santa, de mano de mi Madre Santa, una gran bendición. Una gran bendición derramo en este día sobre esta montaña Santa. Ahora hermanos voy a bendecir vuestros cirios. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo
Hermanos, vuestros cirios han sido bendecidos con una luz especial, la luz de la vida, la luz de la verdad. Haced que permanentemente la luz que hoy os ofrezco esté en vuestros hogares… sí hermanos, a ti te respondo, las 24 horas del día.
Ahora hermanos, doy paso a mi Madre Santa, haced lo que os pide. Tomadla de la mano.
Luz Epifanía:
Señor, Madre… ¡Ay qué alegría!... se abre la puerta de tu Corazón Inmaculado… Madre, ¿yo puedo entrar?... ¡Que sí!... Yo y todos… Madre, gracias. La puerta es enorme, yo quiero entrar, yo no quiero regresar. ¡Ay Madre que grande es! Cuantos ángeles, arcángeles… que luz, que música, que canticos celestiales. Haz que no quede nadie, haz que entren todos. Rocíame de tu gracia, rocíanos a todos… que grande es, si no se ve el fin, no veo el fin…
Madre, tengo que regresar. Gracias Madre, gracias… sí Madre te debo obediencia pura.
La Stma Virgen:
Hijitos míos, todos, absolutamente todos, habéis entrado en este día dentro del refugio de mi Corazón Inmaculado. Conservad esta gracia que en este día os he venido a traer.
Y sin más por hoy, hijitos míos, en presencia de mi amado Hijo, Jesús, os vuelvo a preguntar, llenos de gracia respondedme: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? Orad por Ella ¿Amáis a vuestro pastor? Orad por él.  Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?

Ésta es vuestra fe. Ésta es la verdad. Amad a Cristo, seguid a Cristo, adorad a Cristo y en su Divina presencia, en este día os bendigo como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu. Adiós hijitos míos.