domingo, 1 de junio de 2014

Mensajes Virgen Mayo 2014

PRIMER VIERNES: 02 – MAYO – 2014

Décima estación del Vialucis. Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice.
Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad saludando a la Santísima y Divina Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todos los habitantes de este planeta. Hijitos míos, en este día os digo con profundo dolor, lo que mi ojos ven: Veo hijitos míos, a las tres potencias mundiales, preparando, hijitos míos, una guerra mundial, una guerra dolorosa, una guerra sangrienta. ¡Ay hijitos míos! Por eso es que os pido y obedecedme todos, hagáis en este día y viváis con profundo dolor este santo Vía lucis, pidiendo en cada una de sus estaciones, la paz. Pedid la paz hijitos míos, pedid la paz.

Luz Epifanía:
Señor, mi Señor, tú también está sangrando Señor, veo tus manos y tus pies y tu rostro ensangrentado. Señor cuanto dolor veo hoy, cuanto dolor veo, Señor, ayúdanos…. Me ahoga… tu dolor entra en mi garganta, Señor. Dime que tengo que hacer, Señor, dímelo. Dime que quieres de mí, que necesitas de esta pobre y humilde mujer que te entregó su vida cuando te conoció y te la sigue ofreciendo cada día. He aquí tu pequeña esclava, bendícenos Señor y ayúdame con este ahogo que entra en mi corazón. Señor, tu dolor ahoga mi garganta. Mi corazón siente un profundo pinchazo con este dolor tan profundo. Señor, solamente verte hoy y ver a nuestra Madre, tengo tanto miedo… te ofrezco este ahogo, Señor.

La Stma Virgen:
Hijitos míos, el dolor de esta pobre alma, entregándose cada día por esta humanidad. Vuestro dolor es su dolor, vuestras lágrimas son sus lágrimas. Hijitos míos, haced lo que os pido.
Y sin más por hoy, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis a vuestro pastor?  Orad por él. Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Estad unidos, orad unidos. Yo, vuestra Madre celestial, os bendeciré.
Y en este día, hijitos míos, en presencia de mi amado Hijo Jesús, yo os bendigo en este día como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu Santo.
Adiós hijitos míos



PRIMER SÁBADO: 03 – MAYO – 2014

Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:

Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.

Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad saludando a la Santísima y Divina Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores del mundo.

Hijitos míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a mis almas consagradas: religiosas, sacerdotes, obispos y cardenales. Escuchadme hijitos míos y entended todos lo que en este día os voy a pedir. Sí, hijitos míos, en este día os digo, a los pies de esta montaña santa, lo que mis ojos ven: Veo un ejército grande, grande y poderoso, un ejército de Judas, extendiéndose por todo el planeta tierra. Quieren, hijitos míos, acabar con mi Santa Iglesia, pero tened cuidado porque vosotros, con profundo dolor os digo, sois sus favoritos.

En este día os pido: Sed mansos como palomas pero astutos como serpientes. Este ejército, este ejército de Judas compra las almas, las almas se dejan comprar. Tened cuidado, hijos míos, os prevengo, habrá tanto dolor. Como ya os tengo predicho, se levantarán religiosas contra religiosas, sacerdotes contra sacerdotes, obispos contra obispos, cardenales contra cardenales. Si miráis un poco hijitos míos, la guerra ya ha empezado.

Hijitos míos, si pudierais entender este misterio os amaríais tanto los unos a los otros como os amo yo.

Y sin más por hoy, hijitos míos, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os pregunto una vez más, respondedme con sinceridad: ¿Amáis a Dios Padre? Amadle con todo vuestro corazón, pero respondedme con sinceridad: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo, la Santísima y Divina Trinidad? Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Ésta es vuestra fe, ésta es la verdad

No olvidéis a vuestro pastor, orad por él. Amad y vivid dentro de mi santa iglesia, compartiendo vuestra vida con sus pastores
Y sin más Yo os bendigo, hijitos míos, en presencia de mi amado Hijo Jesús, como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu.

Adiós hijitos míos

13 – MAYO – 2014

Cuarto misterio de dolor, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:

Hijos míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad saludando a la Santísima y Divina Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores del mundo.
Hijitos míos, el mensaje de hoy va dirigido a todos los habitantes de este planeta. Sí, hijitos míos, como ya os tengo anunciado, unas grandes tinieblas, densas, muy densas, cubrirán la tierra. Por eso en este día os pido: Quiero ver luz en vuestros hogares. Una vez más os pido: Quiero cenáculos de oración, cenáculos familiares con Dios y conmigo. Sí, hijitos míos, quiero ver brillar en vuestros hogares la luz del santo rosario. Quiero ver brillar en vuestros hogares la luz del Santo Evangelio. Quiero ver día a día como se alimentan vuestros hogares, se enriquecen vuestras almas con la palabra de Dios. Sí, hijitos míos, haced lo que os pido.
Ahora hijitos míos, mí amado Hijo Jesús está con vosotros, escuchadle, amadle, adoradle, haced lo que os pide.

Jesús:
Hermanos, Yo soy Jesús, Jesús de Nazaret, el Llagado, el Crucificado, el Hijo del Padre. Como veis hermanos, soy fiel a nuestras citas… y vosotros ¿lo dejáis todo? Dejadlo todo, hermanos y acudid a nuestras citas, aquí en esta montaña santa. Yo, vuestro Jesús, de mano de mi Madre Santa, María Inmaculada, descendemos del cielo a traeros la salvación.
Sí hermano, a ti te respondo. Abre tu corazón al Corazón de María Inmaculada. Sé fiel, ten cuidado, ten cuidado con lo que haces o será tu perdición.
Ahora hermanos, voy a bendecir vuestros cirios con una gran bendición: Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Patri et Filio et Spiritu Santo. Patri et Filio et Spiritu Santo.
Vuestros cirios, hermanos, han sido bendecidos. Os pido una vez más y os hago saber y entender que a través de estos cirios, mi luz y mi imagen estará presente en vuestros hogares. Haced lo que os pido, hermanos. Entended lo que os pido. El planeta tierra se está llenando de espíritus del mal. Como ya os tengo predicho, en aquellos hogares donde haya uno de estos cirios, estará exento de los espíritus malignos. Hay tantos, hermanos…
Sí, a ti te respondo otra vez: Ten cuidado con lo que haces. Mira que te aviso.
Ahora, hermanos, doy paso a mi Madre Santa

La Stma Virgen:
Hijitos míos ¿Habéis entendido? ¿Habéis escuchado? Sed fieles al Corazón de Cristo y a mi Corazón Inmaculado. No estaréis solos
Y sin más por hoy en este día, esperando y deseando hayáis entendido cuanto os hemos venido a pedir, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Esforzaos.
Ahora hijitos míos, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os bendigo en este día como el Padre os bendice, por medio del Hijo y con su Espíritu. Acoged esta bendición en lo más profundo de vuestros corazones.
Adiós hijitos míos



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.