PRIMER
VIERNES: 06 – DICIEMBRE – 2019
Novena estación, Luz
Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos míos,
no temáis, soy vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine
siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad,
saludando a la Stma. Y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y
por todos los pecadores del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todos los fieles seguidores
y servidores de Cristo, que en peligro están.
En este día os pido, hijitos míos, os hago saber a todos, en este tiempo
de la gran prueba, el dolor irá avanzando, sí hijitos míos, escuchad y
entended, todos seréis duramente probados, todos los fieles y seguidores de
Cristo, duramente seréis probados, seréis calumniados, perseguidos,
maltratados, amenazados, amenazados de muerte hijitos míos. No tengáis miedo,
sed fuertes y valientes porque no estáis solos, mi manto santo es grande y bajo
mi manto santo caminaré con vosotros y os protegeré. Así pues, hijitos míos,
orad como os tengo mandado, orad con la palabra, orad con la mente, orad con el
corazón, haced lo que os pido y recibiréis diariamente la luz divina del
Espíritu Santo. Os haré ver el camino, os ayudaré a andar y a caminar. Así
pues, hijitos míos, sed fuertes.
Ahora hijitos
míos, mi Amado Hijo Jesús está a mi lado, amadle, seguidle, adoradle, haced lo
que os pide.
Jesús:
Hermanos no
temáis, soy Jesús, vuestro Jesús, Jesús de Nazaret, el Hijo del Padre, el
Llagado, el crucificado. Como veis hermanos, un día más desciendo a esta
montaña santa, de mano de nuestra Madre, nuestra Madre Celestial, María
Inmaculada, descendemos del cielo a traeros la salvación. Ahora hermanos,
bendigo vuestros cirios: “Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Gloria
Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui
Sancto”.
Vuestros
cirios, hermanos, un día más han sido bendecidos. Luz de luz, protección divina
para vuestros hogares. Sí, hermanos, no apaguéis la luz, la luz divina que día
a día os doy a todos a través de estos cirios.
Ahora
hermanos, doy paso a mi Madre Santa, vuestra Madre, María Inmaculada. Amadla,
seguidla, haced lo que os pide.
La Stma Virgen:
Hijitos míos
y sin más por hoy, en presencia de mi Amado Hijo Jesús y en la cima de esta
montaña santa os pregunto una vez más:
¿Renunciáis
a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios
Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? La Santísima y Divina
Trinidad, ¿Amáis mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la Iglesia santa de
Cristo? Orad por ella ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿os
amáis hijitos míos?
Ésta es
vuestra fe, ésta es la verdad, que nada ni nadie le haga vacilar.
Ahora, uníos
todos, tomaos de la mano, aceptaos los unos a los otros y unidos todos subid al
calvario ofreciendo este santo viacrucis con fe y con amor, orando todos por mi
Santa Iglesia, la Iglesia santa de Cristo, vuestra Santa Iglesia.
Ahora, os
tomo de la mano a todos y con vosotros subo al calvario. Mi amado Hijo Jesús,
vuestra Madre Celestial, María Inmaculada orando con vosotros y por vosotros.
En este
estado de gracia, hijitos míos, os abro mi manto santo y os acojo a todos. Sí,
hijitos míos a todos.
Y en
presencia de mi amado Hijo Jesús, bajo mi manto santo, os bendigo en este día
hijitos míos, en este santo viacrucis, como el Padre os bendice, por medio del
Hijo y con su Espíritu.
Adiós,
hijitos míos, hasta pronto.
PRIMER
SÁBADO: 07 – DICIEMBRE – 2019
Cuarto misterio de gozo, Luz
Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos
míos, no temáis, soy vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios
reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa en la cual es mi deseo y en nuestra
divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad,
saludando a la Stma. Y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y
por todos los pecadores del mundo entero.
Hijitos
míos, hijos muy amados, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todos los
habitantes de esta pobre humanidad, si hijitos míos. Hace
un largo tiempo, os predije, vendrán a la humanidad grandes terremotos, grandes
sequías, grandes inundaciones, grandes plagas, plagas malas, hijitos míos, y
hoy os prevengo y os digo a todos, en la cima de esta montaña santa, orad como
os tengo mandado, orad con la palabra, orad con la mente, orad con el corazón,
tomad día a día, el Santo Evangelio y meditarlo con vuestras familias, vuestros
corazones, si hijitos míos, Yo vuestra Madre Celestial, María Inmaculada,
desciendo del Cielo a esta montaña santa y otros muchos lugares más de ésta
pobre humanidad.
Haced lo
que os pido, hijitos míos, haced lo que os pido, y detendréis el tiempo de los
tiempos, sed fuertes y no tengáis miedo, Yo, hijitos míos, vuestra Madre
Celestial, a través de ésta alma víctima, aquí en esta montaña santa, día a
día, os abriré para todos mi Manto Santo y abriré para todos, aquellos fieles a
Cristo y a su Santa Iglesia, mi Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, el
refugio, la puerta del refugio para todos.
Así
pues, hijitos míos, haced lo que os pido y cesarán mis lágrimas.
Hijitos
míos, y sin más por hoy, en la cima de esta montaña santa, os pregunto una vez
más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus
obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo?
La Santísima y Divina Trinidad. ¿Amáis mi Santa Iglesia, Vuestra Santa Iglesia,
la Iglesia Santa de Cristo? Orad por ella. ¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por
él. Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Ésta es
vuestra fe. Ésta es la verdad. Que nada ni nadie os haga vacilar.
Ahora,
uníos todos, tomaos de la mano, aceptándoos los unos a los otros amándoos todos,
como os ama mi Corazón Inmaculado.
Y ahora,
hijitos míos, mis manos, entrelazadas están en vuestras manos.
Ahora,
despliego mi Manto Santo y os acojo a todos, a todos los que en esta día habéis
subido a esta montaña santa, os protegeré
Si,
hijitos míos, y en este estado de gracia, y en presencia de mi Amado Hijo Jesús
os bendigo en este día, hijitos míos, como el Padre os bendice, por medio del
Hijo y con su Espíritu.
Adiós
hijitos míos.
13 –
DICIEMBRE – 2019
Cuarto
misterio de dolor, Luz Epifanía entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos míos, no temáis, soy
vuestra Madre, la Purísima Concepción. Que la paz de Dios reine siempre entre
todos vosotros.
Hijitos míos, en este día os
doy las gracias a todos los que con fe y espíritu de oración, habéis subido a
esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra divina presencia os
inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad, saludando a la Stma. Y
Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados y por todos los pecadores
del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a todo el planeta tierra, si
hijitos míos, con profundo dolor os hago saber, a todos en este día, ha caído
sobre todo el Planeta, la noche negra, si, hijitos míos, ha caído sobre toda la
Tierra, hijitos míos, las tinieblas más densas de todos los tiempos. Con
profundo dolor os digo, a todos os hago saber, mientras dure esta oscuridad,
estas tinieblas tan densas, quién reine en toda la Tierra, será mi adversario,
mi adversario Satanás, todo el Planeta estará bajo su mando, pero a todos os
pido en éste día una vez más, tener cuidado, no caigáis en las redes, en las
trampas malditas que os ha de poner, venid todos a mí, subid a esta montaña
santa y os tomaré de la mano y os cubriré, hijitos míos, con mi Manto Santo,
con vuestra Madre Celestial no perderéis el camino, no perderéis la luz que os
conduce a vuestro Padre Celestial.
Así pues, hijitos míos, una vez más os pido,
sed mansos como palomas, pero astutos como serpientes y orad todos, hijitos
míos, día a día como os tengo mandado, orad con la palabra, orad con la mente,
orad con el corazón.
Y sin más por hoy en este día, en la cima de
esta montaña santa, os pregunto una vez más: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis
a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios
Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu Santo? La Santísima y Divina Trinidad, ¿Amáis mi
Santa Iglesia, vuestra Santa Iglesia, la Iglesia Santa de Cristo? Orad por ella
¿Amáis a vuestro Pastor? Orad por él. Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos? Una
vez más os pido, amaos unos a otros como os ama mi Corazón Inmaculado.
Ahora, uníos todos, tomaos de la mano, aceptaos
los unos a los otros, amándose en profundidad, si hijitos míos.
Ahora, todos de la mano, mis manos
entrelazadas están en vuestras manos y despliego para todos mi Manto Santo, y
os acojo a todos, a todos los que en éste día habéis subido a esta montaña
santa. Y en este estado de gracia y en presencia de mi amado Hijo Jesús, en la
cima de esta montaña santa, os bendigo en este día, como el Padre os bendice,
por medio del Hijo y con su Espíritu.
Adiós,
hijitos míos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.