PRIMER VIERNES: 04 –
ENERO – 2013
Décima estación, Luz Epifanía entra en
éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos
míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios
reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
Divina presencia os inclinéis todos besando el suelo en acto de humildad
saludando a la Santísima Trinidad pidiendo perdón por vuestros pecados y por
todos los pecadores del mundo.
Hijitos
míos, el mensaje de hoy es de dolor y va dirigido a esta nación, vuestra
nación. Ha llegado, hijitos míos, ha llegado la gran prueba de la que os he
venido anunciando a lo largo del tiempo. Será tan dolorosa, causará tantas
lágrimas. ¡Ay hijitos míos! Por eso os pido en este día subáis a esta montaña
santa, todos los primeros viernes de cada mes y viváis todos juntos la pasión
de Cristo. Oréis este Santo Viacrucis con fe y amor. No estaréis solos, Yo,
Vuestra Madre Celestial y mi amado Hijo, Jesús, oraremos con vosotros y por
vosotros. No tengáis miedo hijitos míos, quiero ser entendida y obedecida por
todos. Mi amado Hijo Jesús y yo, Vuestra Madre Celestial estaremos a vuestro
lado.
Ahora,
hijitos míos, mi Amado Hijo Jesús está a mi lado, escuchadle, adoradle.
Jesús:
Hermanos,
Yo soy Jesús, vuestro Jesús, Jesús de Nazaret. El Llagado, el Crucificado, el
Hijo del Padre. Como veis hermanos no falto a nuestras citas. En este día voy a
bendecir vuestros cirios. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri
et Filio et Spiritu Santo. Gloria Patri et Filio et Spiritu Santo.
Hermanos,
vuestros cirios han sido bendecidos, a través de ellos mi luz y mi imagen
estarán presentes en vuestros hogares. Ahora hermanos doy paso a mi Madre
Santa. Amadla, seguidla, haced lo que os pide. Su amor es tan grande, su amor
es tan grande por todos, que vuestra pequeñez no alcanza a entender.
La Stma Virgen:
Hijitos
míos, sin más por hoy, en presencia de mi amado Hijo Jesús os tengo que
preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a sus
obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu santo?
¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al Obispo de Roma
vuestro Papa? Y vosotros ¿os amáis hijitos míos?
Ésta
es vuestra fe. Ésta es la verdad.
Y
sin más Yo os bendigo, hijos míos, en presencia de mi amado Hijo Jesús, como el
Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.
Adiós
hijitos míos.
PRIMER SABADO: 05 -
ENERO – 2013
Cuarto misterio de gozo, Luz Epifanía
entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos
míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios
reine siempre entre todos vosotros.
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Santísima
y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los
pecadores del mundo.
Hijitos míos, el mensaje de hoy va dirigido a todo mi Ejército Blanco,
presente y ausente y a su pastor.
Quiero
hijitos míos, es mi deseo, subáis a esta montaña Santa todos los primeros
sábados de cada mes del año que ahora comienza y oréis conmigo los quince
misterios de mi santo rosario. Quiero ser, quiero que este mensaje que
desciende del cielo en este día, que viene de la mano de vuestra Madre
celestial, quiero ser entendida y obedecida. Hijitos míos, en el tiempo de la
gran prueba, haced lo que os pido. No tengáis miedo, Yo, hijitos míos, siempre
estaré a vuestro lado, al lado de aquellos que me sean fieles. Sí, hijitos
míos, estaré al lado de todos y cada uno de vosotros.
Y
sin más por hoy, hijitos míos, en presencia de mi amado Hijo Jesús, os tengo
que preguntar: ¿Renunciáis a Satanás? ¿Renunciáis a sus secuaces? ¿Renunciáis a
sus obras? ¿Amáis a Dios Padre? ¿Amáis a Dios Hijo? ¿Amáis a Dios Espíritu
Santo? ¿Amáis mi Santa Iglesia? ¿Amáis al
Obispo de Roma, vuestro Papa? Orad por él. Y vosotros ¿Os amáis hijitos míos?
Haced
crecer el amor en vuestros corazones. Hijitos míos, lo que se da, se recibe. Yo
os traigo amor.
Y
sin más yo os bendigo, en presencia de mi Amado Hijo Jesús, como el Padre os
bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.
Adiós
hijitos míos.
13- ENERO – 2013
Cuarto misterio de gloria, Luz Epifanía
entra en éxtasis y la Stma Virgen dice:
Hijos
míos no temáis soy vuestra Madre la Purísima Concepción, que la paz de Dios
reine siempre entre todos vosotros
Hijitos
míos, en este día os doy las gracias, a todos los que con fe, y espíritu de
oración habéis subido a esta montaña santa, en la cual es mi deseo y en nuestra
divina presencia, os inclinéis todos besando el suelo, en acto de humildad, saludando a la Santísima
y Divina Trinidad, pidiendo perdón por vuestros pecados, y por todos los
pecadores del mundo.
Hijitos míos, el mensaje de hoy va dirigido a esta nación, vuestra nación.
Escuchadme, a todos me dirijo, cristianos y ateos. Ha llegado el momento en que
todos, hijitos míos, toméis el santo rosario en vuestras manos y oréis todos
los días pidiendo todos, la paz para esta nación, vuestra nación. Orad con fe y
confianza. Sí hijitos míos, también os pido en este día, subáis a esta montaña
santa todos los días 13 de cada mes del año que ahora comienza, mi Amado Hijo,
Jesús, y yo, Vuestra Madre Celestial, oraremos con vosotros y por vosotros.
Luz Epifanía:
Señor, mi Señor, estás llagado,
estás crucificado. Tu dolor entra en mi
corazón y me ahoga. Déjame Señor que te saque esos clavos, déjame que me
acerque a ti, Señor… ¿Qué esos clavos saldrán con la oración?... Señor si yo
oro mucho, si las veinticuatro horas del día estoy contigo y con nuestra
santísima Madre… ¿pero los demás no oran?... sí, ayúdalos a amarte, ayúdalos a
todos… Déjame Señor que te quite uno de tus clavos, déjame Señor… acércate a
mí, acércate. Déjame que te toque tus clavos… Sangras Señor… estás sangrando…
La Stma Virgen:
Hijitos
míos, como podéis comprobar, entended el dolor de mi corazón Inmaculado y el
Corazón de Cristo, mi Amado Hijo, Jesús. Haced lo que os pido, estad unidos,
orad unidos, amad mi Santa Iglesia. Mis mensajes serán breves pero fáciles de
entender. Es mi deseo hijitos míos, que todos se conviertan a Cristo. Como ya
os tengo predicho, Yo, Vuestra Madre Celestial, soy la puerta que se abre
a vuestra liberación.
Y
sin más por hoy, hijitos míos, en presencia de mi Amado Hijo Jesús, os pregunto
a todos. Respondedme. ¿Hay en vuestros corazones amor? ¿Amáis mi Santa Iglesia,
el Corazón de Cristo? ¿Amáis a vuestro vicario el Obispo de Roma? Orad por él. . Renunciando siempre a Satanás y a sus
secuaces y a sus obras. Amad siempre hijitos míos, el Corazón de mi Santa
Iglesia. Quiero que en vuestros corazones sea el amor grande a Roma, el
Vaticano. Amadle siempre... sí, hijitos míos, sed fieles seguidores de Cristo y
de su Santa Iglesia.
Y
sin más Yo os bendigo en este día, en presencia de mi amado Hijo Jesús, como el
Padre os bendice, por medio del Hijo y con su espíritu.
Amaos
hijos míos, sin amor no hay vida. Si no hacéis crecer el amor en vuestros
corazones no entraréis hijitos míos, en las moradas celestiales.
Bajo
esta bendición me despido en este día diciéndoos:
.Adiós
hijitos míos. Os amo. Mi corazón inmaculado os ama tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.